Este miércoles 8 de noviembre se cumple una semana del homicidio de Jack Ramírez Comas, el joven de 23 años, asesinado a bala por delincuentes para robarle su vehículo en el barrio Las Mercedes de Barranquilla.

Su familia, amigos, conocidos y vecinos realizarán 8 días después una velatón en el lugar donde ocurrió el hecho criminal para hacer un llamado a las autoridades a tomar medidas frente a un delito que se cataloga como uno de mayor impacto en la ciudad: el robo de automotores.

Y es que dentro de esta acción delincuencial hay todo un entramado que va desde la comercialización de autopartes hasta la venta misma del automotor fuera de la ciudad cambiando placas y color. 

Según cifras de la Policía Metropolitana, este año han sido robados 372 vehículos en Barranquilla y el área metropolitana, de los cuales 129 han sido recuperados. Es decir, que solo el 35 % de los vehículos robados han logrado ser devueltos a sus legítimos dueños.

Cifras de la Oficina de Seguridad y Convivencia Ciudadana del Distrito precisa que en el 2022 fueron robados 379 vehículos, número que fácilmente podría superarse este año porque aún resta parte de noviembre y diciembre.

El año anterior fueron recuperados 111 vehículos, de esos 379.  En otras palabras, hubo una recuperación del 29 %. 

Las modalidades más comunes

La modalidad más común, según la Policía Metropolitana, de robo de vehículo es la halado. Es decir, cuando el automotor se encuentra parqueado y de alguna manera los delincuentes se las ingenian para abrir la puerta, encender el motor y llevárselo. 

Suele suceder normalmente con los vehículos de alta gama en el norte de Barranquilla o que dejan en vía pública o en parqueaderos de barrios. 

Le sigue la modalidad de robo con arma de fuego, como la ocurrida con el joven Jack Ramírez en el barrio Las Mercedes. El joven fue impactado a bala en la cabeza y el delincuente, quien se bajó de otro vehículo, se subió al del joven para llevárselo. 

Cabe resaltar que adicional a la intimidación con el arma de fuego, los delincuentes se están valiendo de chocar el vehículo de la víctima suavemente para que el conductor caiga en la ‘trampa’ de bajarse y así evitar que intente huir a toda velocidad. 

Así pasó con el caso de Jack. Ha pasado una semana y hasta el momento las autoridades no han indicado qué tanto han avanzado en las investigaciones. 

Otras de las modalidades de robos de vehículos es la del ‘falso servicio’. En este caso, normalmente se usan para robar camiones. 

Llaman a la víctima al celular aseguraron que van a transportar una mudanza o mercancía pesada, cuando el conductor llega al punto acordado lo intimidan con arma de fuego, lo llevan a una zona enmontada del área metropolitana y allí lo dejan amarrado para los antisociales huir con el camión. 

Cuando el conductor logró desamarrarse para pedir ayuda ya los delincuentes le llevan mucha ventaja y el camión prácticamente desaparece.